9 de julio de 2012

Geburtstag

Crueldad.
Proveniente del latín, crudelítas, se define como "Inhumanidad, fiereza de ánimo, impiedad" o "Acción inhumana".


Esta mañana me han dado una sorpresa tras abrir la puerta del Jardín. Una de esas sorpresas maravillosas que te alegran muchos días y que, cada vez que la ves, te dibuja una sonrisa.

Mi sorpresa ha llegado en forma de carta, a las 23:59:43. A 17 segundos de llegar tarde. En ella había una pequeña historia, muchos buenos deseos, algunos recuerdos y amor. Aún no he tenido tiempo, pero sé que la leeré tantas veces que acabaré por memorizarla y sentir las palabras en mi piel.

Mientras escucho The Piano Guys, unos recientes e inspiradores músicos, ojeo por encima Un Mundo sin Fin de Ken Follet -alabado sea este señor-, la continuación de Los Pilares de la Tierra. Hace unos días que acabé éste último (hice un intento de leerlo a los 14 años, un gran fracaso); resultó totalmente enriquecedor, pero tras la extensa lectura deseaba algo más ligero. Tras leer La Ladrona de Libros, una enternecedora escena de los tiempos de la Alemania nazi, estoy leyendo Las Horas Distantes, encarecidamente recomendado por mi madre. Pero ya le estoy haciendo ojos tiernos al segundo tomo de los pilares, y el tercer tomo estará pronto en mi poder. Este verano el Jardín va a estar exuberante.

Volviendo a mi carta, sigo marcando la cuenta atrás en el calendario e inventando distracciones para que los días pasen más rápido, no es razonable que el tiempo se esté comportando de forma tan cruel en estas situaciones. Pero es inevitable.

Me conformo con algún paisaje, algún retrato, y echarte de menos sin que sepas nada.

~Hoy puedo decir que estoy radiante, feliz, inquieta. Y todo gracias a ti.~


El vestido de la noche de mi cumpleaños acompañado por chanclas, la mochila de la playa, la toalla y mi cama deshecha.


Alles Gutes zum Geburtstag!
Gracias.